En relación con el tema de las varas, sugerimos formularnos la siguiente pregunta:… ¿cuándo deberíamos cambiar las varas de nuestros palos?
La teoría dice que las varas sólo tienen que sustituirse cuando estén dañadas, o bien cuando no se ajusten al swing del jugador… Efectivamente, cambiamos las varas si se han doblado, se han torcido, están oxidadas o picadas, y si tienen una fisura o se están deslaminando. También se reemplazan cuando los palos son de un jugador joven que está creciendo y al ganar estatura requiere una pulgada más, si nuestra fuerza y destreza van en progresión, y necesitamos jugar varas más rígidas, o menos duras, o incluso pasarlo del acero al grafito… Sin embargo, lo más lógico es que valga la pena cambiarlas cuando los fabricantes hayan sacado alguna novedad que mejore la performance de nuestros palos… Es más bien por este último motivo por el que los profesionales las suelen sustituir más veces que un amateur, pero tampoco tanto como uno pueda imaginar. (más…)