Probablemente, la alineación es lo más importante para hacer un buen swing de golf. Muchas veces el movimiento que un jugador hace está fuertemente condicionado por una buena o mala alineación previa.
Consideremos que no es lo mismo querer apuntar a un sitio que apuntar realmente a ese sitio. Muchas veces pensamos que apuntamos a un sitio, pero realmente estamos apuntando a otro.
Ahora bien, la alineación no debe ser perfecta, hay un factor humano, de compensaciones, de sensaciones que hace que podamos ser flexibles en este tema, no somos francotiradores con una mira telescópica. De hecho, no todos los jugadores de golf profesionales se alinean igual delante de la pelota. Lo que si hay que evitar es una mala alineación que condicione el buen movimiento que queremos hacer. El fallo más habitual es que el jugador queda cerrado con respecto al objetivo, o sea, su cuerpo apunta muy a la derecha con respecto a donde quiere mandar la bola, vemos el pie izquierdo muy por delante del derecho (en caso de jugadores diestros), combinado con los hombros en el mismo sentido, o al contrario, abiertos. Este fallo de alineación lleva al jugador a no poder hacer un buen desplazamiento, un buen cambio de peso. Para evitar eso, los jugadores se giran en exceso hacia la izquierda cortando la pelota.
Consejos para mejorar la alineación:
- Que alguien supervise nuestra alineación. Un compañero o un profesor debe ayudarnos, si uno está solo, la alineación pasa a ser algo completamente subjetivo y es posible que haya un desajuste (en muchos casos grande). Para convertir el apuntar en algo objetivo es muy bueno tener la ayuda de alguien
- Entrenar una rutina de alineación. Muchas ni mira donde quiere jugar la pelota. Con un simple proceso podemos mejorar esta habilidad de apuntar donde realmente creo que apunto… Primero, coloquemos la cara del palo y asegurémonos que apunta al objetivo. Después pongamos el cuerpo con la sensación que está un poco a la izquierda del objetivo
- Usemos una varilla o un palo para tener una referencia de donde estamos apuntando. Poner algo en el suelo que nos diga donde estamos alineados va a ayudar enormemente a evitar desajustes,… saber que aunque la pelota no salga al objetivo estamos apuntando bien
Recordemos siempre que la bola en el campo sale donde apuntamos, no donde nosotros creemos que estamos apuntando. No es lo mismo y afectará la calidad del golpe.